viernes, 15 de abril de 2011

Split, la perla de Diocleciano

Lo primero decir que si no posteo más es porque no tengo ordenador y dependo de que el recepcionista de turno me deje pasar a la trastienda a conectarme... Lo primero que haré llegando a Galicia será comprarme un ordenador!!!

Split me sorprende... Y es que cuando vas entrando en la ciudad esta parece poco más que una simple aglomeración de edificios junto al Jadron (Adriático en croata) Pero es llegando al puerto cuando Solitario sorprende al viajero...

El palacio de Diocleciano encierra tanta belleza y tantos secretos como años tienen sus construcciones... Y es que este emperador romano, firme perseguidor de los cristianos, tuvo un gusto exquisito tanto en la elección del lugar de construcción como en la distribución del mismo palacio. Actualmente contenedor de parte del casco histórico una infinidad de inmensas calles hacen del palacio un lugar para perderse y conocer la magnífica historia de la ciudad.

También como no, nombrar el paseo marítimo, precioso... donde los ciudadanos de Split aprovechan hasta el más mínimo rayo de sol para reunirse alrededor de un buen café o de un rico helado.

Definiría Split como una fina joya del Adriático digna de ser visitada y relajarse por sus calles como antaño Diocleciano acostumbraba.

Espero que después de leer hasta aquí os haya gustado mi breve retrato sobre la ciudad de Split!!!

SUSQUIEROOOO!!!

PD: Colgaré fotillos en el Facebook!! :-P

3 comentarios:

  1. MUCHO, NOS HA GUSTÓ MUCHO, MUCHO!
    Su

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  2. me encanta . me apetece darme una vuelta este verano por alli- ,me comento soraya que estas de guia dime dónde y cuando para hace
    rla contigo. saludos Maite l.´matesanz

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  3. El aspecto macizo de la ciudad fortaleza ha sido interpretado por algunos como el final de una época, la de las proporciones clásicas, y el comienzo de otra, en la que el emperador se ha de cuidar de las invasioens que ya son moneda común dentro del Imperio. En realidad es una ciudad dentro de una fortaleza que encierra todos los elementos de una ciudad romana: templos, calles, tiendas, curias...

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